Cualquier encuentro con el invisible se disfruta mucho, y en esta oportunidad quien pudo darse el gusto fue el amigo Nicolás durante la mañana del 5 de Enero pasado mientras se daba una vuelta por el Arroyo Mártires de la Ciudad de Posadas.
Cualquier encuentro con el invisible se disfruta mucho, y en esta oportunidad quien pudo darse el gusto fue el amigo Nicolás durante la mañana del 5 de Enero pasado mientras se daba una vuelta por el Arroyo Mártires de la Ciudad de Posadas.